Ser en la vida romero,
romero sólo que cruza siempre por caminos nuevos.
Ser en la vida romero,
sin más oficio, sin otro nombre y sin pueblo.
Ser en la vida romero, romero..., sólo romero.
Que no hagan callo las cosas ni en el alma ni en el cuerpo,
pasar por todo una vez, una vez sólo y ligero,
ligero, siempre ligero.
Que no se acostumbre el pie a pisar el mismo suelo,
ni el tablado de la farsa, ni la losa de los templos
para que nunca recemos
como el sacristán los rezos,
ni como el cómico viejo
digamos los versos.
La mano ociosa es quien tiene más fino el tacto en los dedos,
decía el príncipe Hamlet, viendo
cómo cavaba una fosa y cantaba al mismo tiempo
un sepulturero.
No sabiendo los oficios los haremos con respeto.
Para enterrar a los muertos
como debemos
cualquiera sirve, cualquiera... menos un sepulturero.
Un día todos sabemos
hacer justicia. Tan bien como el rey hebreo
la hizo Sancho el escudero
y el villano Pedro Crespo.
Que no hagan callo las cosas ni en el alma ni en el cuerpo.
Pasar por todo una vez, una vez sólo y ligero,
ligero, siempre ligero.
Sensibles a todo viento
y bajo todos los cielos,
poetas, nunca cantemos
la vida de un mismo pueblo
ni la flor de un solo huerto.
Que sean todos los pueblos
y todos los huertos nuestros.
León Felipe. Versos y Oraciones del Caminante (1920)
La primera versión de este poema la realizó el cordobés José Emilio López Delgado, más conocido como Emilio José en 1976 (los mayores recordareis su tema "Soledad" de 1974) en el disco "Alma de Romero"
En la canción canta los primeros catorce versos y los del 50 al 53, hermosa versión olvidada, a la que tituló "Ser en la vida romero"
Amancio Prada la incluyó en versión recitada de los primeros catorce versos en su disco "Zamora" del 2007, en la tercera pista del disco, que incluia también el poema "Como tú" cantado y el poema "Se todos los cuentos" recitado con música de fondo.
En el 2014 Walberto Mendoza, la graba también declamada en su disco "Antología rota de León Felipe". Al año siguiente Evoeh, graba su versión musicada, con la que me despido, que incluye los primeros y los últimos catorce versos del poema
Buen inicio de semana