De nuevo viernes y como ayer os hablaba de un romance "culto" para compensar hoy os hablo de una canción popular, y aprovecho para compartir parte de mis regalos de los Magos, en este caso el último disco de Rozalén, Matriz, puesto a la venta hace un par de meses y del que no he hablado antes, porque han surgido otros temas, Son veintiun canciones, (quince largos y seis interludios) donde graba temas de toda la geografía hispana, acompañada por grandes y buenos músicos. La canción de hoy es la pista décimo novena y la canta junto a Eliseo Parra
Esta es su letra
Si la conoceis, la letra como en casi todas las tonadas populares puede variar ligeramente, al igual que el nombre. Su origen no es claro, pero parece que está recogida a finales del siglo XIX en Andalucia, aunque su extensión es más amplia. Eso parece claro, ya que la introducción de la tonada, se recoge en la Zarzuela estrenada en 1897 "Agua,azucarillo y aguardiente" del gran maestro Federico Chueca, así suena al inicio del coro de las niñeras. Solo al inicio, aunque es difícil dejar de escuchar esta música
Otro maestro, el gran Joaquin Díaz la recogió y la grabó por primera vez en su disco "De la picaresca tradicional" de 1970. La letra varia un poco, pero la idea de la burla de los pretenciosos queda clara
Hay versiones para niños y también se cantan en América, una versión de este tipo es la que grabó María Dolores Pradera, en su disco "Reverdecer" (cuarto corte) de 1986, aunque el inicio difiere un poco, la versión es bastante similar
La tonada y la música se utilizaron durante la Guerra Civil, fenómeno que se dió en ambos bandos, aunque fué mucho más frecuente en la zona republicana (Cabo de Palos, Que será,...) pero prefiero acabar con algo en positivo. Esta canción parece permanecer sobre todo en la zona occidental, hay versiones de tierras leonesas y salmantinas, La versión con la que acabo es la que realiza el músico y acordeonista Raúl Díaz de Dios, que la grabó en su primer disco de 2015 "El fuelle del Charro",. Dedicarse al folk y tocar el acordeón es algo natural y siempre bien recibido en lugares como el País Vasco, pero no es tan fácil si eres de Salamanca y pretendes reinterpretar los ritmos de las tierras castellanas, aún así es un placer escucharle
Buen viernes