El viejo y el sol
Había vivido mucho. Se apoyaba allí, viejo, en un tronco,
en un gruesísimo tronco, muchas tardes cuando el sol caía.
Yo pasaba por allí a aquellas horas y me detenía a observarle.
Era viejo y tenía la faz arrugada, apagados,
más que tristes, los ojos.
Se apoyaba en el tronco, y el sol se le acercaba primero,
le mordía suavemente los pies
y allí se quedaba unos momentos como acurrucado.
Después ascendía e iba sumergiéndole, anegándole,
tirando suavemente de él, unificándole en su dulce luz.
¡Oh el viejo vivir, el viejo quedar, cómo se desleía!
Toda la quemazón, la historia de la tristeza,
el resto de las arrugas, la miseria de la piel roída,
¡cómo iba lentamente limándose, deshaciéndose!
Como una roca que en el torrente devastador
se va dulcemente desmoronando,
rindiéndose a un amor sonorísimo, así, en aquel silencio,
el viejo se iba lentamente anulando, lentamente entregando.
Y yo veía el poderoso sol lentamente morderle
con mucho amor y adormirle para así poco a poco tomarle,
para así poquito a poco disolverle en su luz,
como una madre que a su niño
suavísimamente en su seno lo reinstalase.
Yo pasaba y lo veía.
Pero a veces no veía sino un sutilísimo resto.
Apenas un levísimo encaje del ser.
Lo que quedaba después que el viejo amoroso,
el viejo dulce, había pasado ya a ser la luz
y despaciosísimamente era arrastrado
en los rayos postreros del sol,
como tantas otras invisibles cosas del mundo.
Vicente Aleixandre. Historia del Corazón 1954
El jueves al hablar del reciente premio Cervantes de este año, Francisco Brines, creo que dejé escrita su buena relación con Vicente Aleixandre, que al igual que hizo con todas las personas que pudo ayudó a lo largo de su vida.- Poeta poco reconocido internamente, pese a que le fuera otorgado el premio Nobel de Literatura en 1977. por distintas razones, quizá por su exilio interior o por sus características personales, lo cierto es que existen pocas versiones musicales de sus poemas, acabo con una versión musicada de uno de sus poemas del libro "Sombra del Paraiso" grabada por Inés Fonseca en su disco Generación del 27, publicado en el año 2007
Buen domingo