Últimamente escribo sobre el amor, la enfermedad, Paris y las Bandas Sonoras, por lo que me parece que no puedo desaprovechar de juntar todos estos elementos y hablaros de la reciente película estrenada en España el viernes 11 de enero, ganadora del festival de Cannes del 2012, "Amour" y de la que se ha hablado estos días en relación con la nominación de Emmanuelle Riva (la protagonista de "Hiroshima mon amour" en el año 1959) al oscar a la mejor actriz, Emmanuelle cumplirá 86 años el próximo 27 de febrero y el reconocimiento de los mayores en el cine sigue siendo todo un acontecimiento.
La película es bastante trágica, con una historia de la vida en las edades maduras, de una generación que sigue apostando por intentar vivir y morir con cierta dignidad, lo que cada vez es más complejo, y en Madrid, con los recortes que anuncian entre otros las restricciones en "Cuidados Paliativos" será francamente difícil.
La película no va a poder ser fácilmente accesible para el público en general pues además de la "dificultad" de su visionado se junta la escasa distribución de las copias, En cualquier caso mi intención no era hablaros de la película en si misma, con opiniones dispares, ya que podeis encontrar buenas críticas como las de Blogdecine, sino de la necedad de ocultar la muerte y del cambio en el abordaje de la "tercera edad" en nuestro país, y de la música romántica del XIX.
En relación con lo primero, recuerdo que a finales de los 70 siendo aún estudiante de medicina, pase dos semanas de vacaciones en Suiza, en casa de la familia de un compañero que pasó dos meses trabajando en una "residencia de tercera edad", en esos momentos eso en nuestro páis era algo impensable, los "asilos" eran para personas sin recursos ni familia, al comenzar a aumentar la población adulta y comenzar el trabajo de la mujer, principal y casi única cuidadora fuera de casa, los cambios sociales fueron muy rápidos, a ello se unió una universalización de la sanidad y acceso a tratamientos medicos para la práctica totalidad de la población, l oque contribuyó aún mas a prolongar la vida y que situaciones como las que relata Haneke en su película fueran cada vez más comunes.
Os dejo con el trailer de la película, en original en francés con subtítulos en español
La película trata del tramo final de la vida de dos músicos, y lógicamente el piano está presente a lo largo de toda la película, he titulado la entrada "el Romanticismo", porque este en el sentido clásico, no existe en la película, nadie espere ver algo parecido al "estanque dorado" de hace 30 años, En "Amour" el romanticismo está en la música de Schubert, presente en tres de los siete temas que componen la banda sonora, seleccionada e interpretada por el pianista y compositor francés Alexandre Thauraud. Para Victor Hugo el roamnticismo era "la literatura del siglo XIX", pero Schubert transforma la palabra en sonido, y el verbo se hace música, una música íntima llena de poesía y de lírica que nos llega al corazón.
La música seleccionada por Tharaud, son dos de los primeros cuatro "Impromptus" y uno de los seis "Momentos musicales", composiciones para piano solista de menos de media hora en su conjunto cada una de ellas, y que suelen publicarse unidas en los discos, os dejo con las tres en el orden de su aparición en la banda sonora:
1 Impromptu nº 3
2 El Impromptu nº 1, es mas largo y se distinguen dos melodias que se entremezclan con variaciones de las mismas, muy bello
3 Y la última composición, el el "momento musical" número tres, un allegro corto y muy animado para acabar este escrito triste, os dejo con una actuación en directo del joven treintañero pianista francés "David Fray", Su disco de finales del 2009 donde interpreta precisamente estos temas de Schubert y publicado por la sección de música clásica del sello "virgin", es un abordaje muy interesante y recomendable de la obra de Shubert
Buena semana!!
Jesús