La llama
Asistida por mi alma antigua, por mi alma primera al fin recobrada, y por tanto tiempo perdida. Ella, la perdidiza, al fin volvió por mí. Y entonces comprendí que ella había sido la enamorada. Y yo había pasado por la vida tan sólo de paso, lejana de mí misma .Y de ella venían las palabras sin dueño que todos bebían sin dejarme apenas nada a cambio. Yo era la voz de esa antigua alma. Y ella, a medida que consumaba su amor, allá, donde yo no podía verla; me iba iniciando a través del dolor del abandono. Por eso nadie podía amarme mientras yo iba sabiendo del amor. Y yo misma tampoco amaba. Sólo una noche hasta el alba. Y allí quedé esperando. Me despertaba con la aurora, si es que había dormido. Y creía que ya había llegado, yo, ella, él… Salía el Sol y el día caía como una condena sobre mí. No, no todavía.
María Zambrano Madrid, 1981
María Zambrano (1904- 1991), fue una intelectual y filosofa española, de gran importancia en el transcurso del siglo XX, También cultiva la poesía, dentro del campo del pensamiento y la filosofía, La recordé el pasado sábado con ocasión de una visita de la Exposición de Miguel Hernández en el Instituto Cervantes de Alcalá de Henares. Uno de sus libros recomendables es "Claros del bosque", publicado en 1977. Que es todo un monumento filosófico-poético, del que os dejo un fragmento
Acabo con un poema previo, de su estancia en Roma, cantado por Paco Damas en su último disco, al que titula “Ya”
Pensar y no preocuparse.
Actuar sin decidir.
Seguir y no perseguir.
Reposar sin detenerse.
Ofrecer sin calcular.
No aferrarse a la esperanza.
No detenerse en la espera.
Escuchar sin casi hablar.
Respirar en el silencio.
Dejarse quieto flotar.
Perderse yendo hacia el centro.
Hundirse sin respirar.
Cruzar sin mirar fronteras.
Dejar límites atrás.
Recogerse. Abandonarse.
Solo dejarse guiar.
Ser criatura tan solo,
no haber de sacrificar.
Más allá del sacrificio,
cumplida la voluntad,
sin designio ni proyecto,
sin sombra, espejo ni imagen.
Alga en la corriente lenta.
Alga de vida no más.
Hijo. Criatura. Amante.
Alga de amor. Ya no más.
Lejos de toda ribera.
Por el corazón del agua; ya.
María Zambrano, Roma 21 junio 1958, República de las letras (2004)
Buen martes