Una puerta abierta a la música, la poesía, las versiones y a la sonrisa, con muchas pinceladas de cine y bandas sonoras. En recuerdo y homenaje al antiguo microprograma "Fonocopias" de Radio Nacional de España Radio 5
Siguiendo con el anniversario de J.S. Bach, he elegido esta sonata, que forma parte de las conocidas como incompletas y cuya autoría sigue siendo discutida por distintos autores. Es una composición que me gusta y que consta de tres movimientos, he seleccionada el segundo conocido como siciliano escrito originalmente para flauta y clave. Suena así
En 1996, el pianista de jazz, Eddie Higgins, graba esta versión para su disco "Portrait in Black and White", una versión que combina el respeto al original con la improvisación jazzística
Hay, al menos, 300 versiones grabadas, en distintos estilos.
Una de las más conocidas es la que grabaron los Beach Boys en su disco de 1979, "Light Album". Un comienzo clásico y una continuación cuando menos extraña
El lunes pasado asistí a un pase de la película de José Antonio Hergueta, Caleta Palace, con la presencia del director. Un documental o falos documental seleccionado para los premios Goya de este año, y que me gustó mucho
La historia trata de los sucesos ocurridos en Málaga desde el 18 de julio de 1936 al 8 de febrero de 1937, narrados a través de los testimonios escritos de ocho de las personas que lo vivieron. Como pasar del Paraíso al Infierno o una reflexión sobre la capacidad destructiva de la especie humana cuando siente el regusto de la sangre cerca. Este es el trailer de la película
La música es de la compositora malagueña Isabel Royán, y cuenta con algo menos de cinco canciones que aparecen en los créditos de la película. La canción que suena en un par de ocasiones es esta versión de otros malagueños, el grupo, Chambao, de Canción de Soldados
La voz de María del Mar Rodríguez Carnero, suaviza esta canción que yo recuerdo en las primeras versiones apócrifas de Chicho Sánchez Ferlosio, que llegaron a partir de 1964 tras la grabación por los suecos de Clarte de "los cantos de la resistencia Española"
Aunque la mayor difusión llegó de su salto a Chile de la mano de Rolando Alarcón en 1967 (muy similar a la de Chicho), y grabada posteriormente por Quilapayún en 1968 con el titulo "Dicen que la patria es" Esta versión tiene cambios en la letra
En el 2018 se presentó el documental ·El largo silencio" sobre la Guerra Civil Española en el valle de los Pedroches de Córdoba,, que también cantaba con una versión de este tema, en esta ocasión cantada por la cordobesa de Pozoblanco María José Llergo. Para mí, que estoy acostumbrado a iorla en su registro más flamenco, me sorprendió gratamente, esta versión
José Antonio Hergueta, nos contaba en el coloquio posterior, que un amigo estadounidense le contaba, que allí se había calculado que para que desaparezcan las consecuencias y efectos de una guerra civil, debían pasar ciento cincuenta años. Aún queda algún tiempo. Ojalá no tengamos que oír de nuevo una frase terrible que se repite, sobre las guerras: «Dichosos los que mueren primero».
Acabo con otro tema que suena en la película "Stormy Weather", en una versión de 1934, creo que con la voz de Harold Arlen
Os recomiendo ver la película donde no hay malos y buenos sólo violencia injustificada , que contrasta con la luz mediterránea de Málaga, tan bien recogida en el film. Posiblemente a finales de este año se ponga en TVE y en Canal Sur.
Despecho ¡Ah, que estoy cansada! Me he reído tanto, Tanto, que a mis ojos ha asomado el llanto; Tanto, que este rictus que contrae mi boca Es un rastro extraño de mi risa loca.
Tanto, que esta intensa palidez que tengo (Como en los retratos de viejo abolengo) Es por la fatiga de la loca risa Que en todo mi cuerpo su sopor desliza.
¡Ah, que estoy cansada! Déjame que duerma; Pues, como la angustia, la alegría enferma. ¡Qué rara ocurrencia decir que estoy triste! ¿Cuándo más alegre que ahora me viste?
¡Mentira! No tengo ni dudas, ni celos, Ni inquietud, ni angustias, ni penas, ni anhelos, Si brilla en mis ojos la humedad del llanto, Es por el esfuerzo de reírme tanto…
Juana de Ibarbourou: Las lenguas de diamante (1919)
Vuelvo a la poesía de la poeta uruguaya, Juana de Ibarbourou, Juana de América, hace año y ,medio largo que no pongo ninguno de sus poemas musicados, y hasta esa semana de junio del 22, había pasado otro año largo
Con ritmo de tango, la bonaerense Dolores Solá (La chiclana) interpreta magistralmente esta versión de Vero Bellini
Acabo con otra versión similar, esta vez con la voz de Daniela Horovitz, en un directo de presentación del proyecto con Vero Bellini siempre al piano
Solos por el parque, por el parque viejo que tenía un largo cansancio de invierno; tras de tantos años volvimos a vernos. yo llevaba el triste corazón enfermo, caía en el suyo la niebla del tedio. cúan lejos las horas vírgenes de duelos en que nuestras vidas eran como versos que a veces rimaban casi sin saberlo...! me clavó sus ojos como en otros tiempos, mas nada me dijo su turbado acento. yo cerraba el arca de mis pensamientos porque no rasgase lo gris del silencio que esfumaba un mudo soñador arpegio... y con una angustia despertaba en nuevo pavoroso acorde dentro de su pecho, nos miramos como se miran los ciegos... y nos separamos para nunca vernos!
Una de las cosas que mas me ha gustado del disco de Elena de Aranoa, además obviamente de su calidad musical es la elección de poetas, el criterio es el de poetas olvidadas, por diversas vicisitudes, juntando a mujeres tan aparentemente dispares, como Lucía Sánchez Saornil, de la que hablé el martes, o Cristina de Arteaga y Falguera, (1902 1984), de familia aristócrata, ahijada de la reina María Cristina (por eso su nombre) y que tras la poesía se dedicó a la vida religiosa, profesando como monja jerónima y estando en la actualidad en proceso de beatificación. Todas son mujeres olvidadas en su aspecto literario en gran parte por el hecho de ser mujeres. El poema corresponde a antes de iniciar su proceso de ingreso monástico, previamente fué la primera mujer en defender una tesis en la facultad de Historia
La popularidad como poeta de Cristina de Arteaga fue grande. Junto a Ernestina de Champourcin y María Teresa Roca de Togores, las tres, jóvenes mujeres pertenecientes a la nobleza español, se hicieron muy populares hacia mediados de la década de 1920 al coincidir la publicación de sendos poemarios que obtuvieron una importante relevancia en el mundo literario y social. En el caso de Cristina de Arteaga esta relevancia llegó al mundo de la música, ya que uno de los mejores compositores clásicos del momento, Joaquín Turina, puso música a tres de sus poemas en 1927: «Corazón de mujer», «Lo mejor del amor» y «Cunas». Os dejo con Corazón de mujer (En el video se incluye la letra del poema)
Quiero serenidad, me dije un día, quiero serenidad para morirme; yo, que afronté la vida sin rendirme, aceptaré la muerte sin porfía.
No quiero que me gane la impaciencia, que este absurdo esperar sin esperanza no se me haga tortura, a semejanza de un turbio agonizar de la conciencia.
Para pasar el ecuador temido quiero mi rebeldía, sosegada, y el ímpetu domado y contenido,
que, si al fin, a morir he de rendirme, no he de ser con la muerte porfiada. Quiero serenidad para morirme.
Lucía Sánchez Saornil, Poesía, ed. Rosa María Martín Casamitjana, Valencia, Pretextos / Instituto Valenciano de Arte Moderno, 1996, p. 167
Sigo con el disco de Elena Aranoa, dedicado a poemas de mujeres olvidadas, La autora declaró: "La música es una herramienta maravillosa de comunicación", defiende Elena Aranoa el camino con el que ha conseguido hacer bella la reivindicación y el reconocimiento a tantas mujeres a las que la historia ha tratado injustamente. "Justicia poética, nunca mejor dicho".
Lucía Sánchez Saornil (Madrid 1895, Valencia 1970), es una de las mujeres claves de la Historia del feminismo, Es una de las impulsoras de la creación de "Mujeres Libres", una organización que se anticipó con mucho a su época y que llegó a contar con mas de veinte mil afiliadas, organización autónoma, que pretendía emancipar a la mujer de la triple esclavitud, "esclavitud de ignorancia, esclavitud de mujer y esclavitud productora", luchando contra la prostitución y favoreciendo la educación, el desarrollo de escuelas y guarderías en las empresas y por supuesto defendiendo el derecho a que "a igual trabajo, igual salario"
De clase obrera y autodidacta, publica su primer poema en 1914, y continua escribiendo hasta su fallecimiento, poemas modernistas, ultraistas, revolucionarios,... una variada producción, que se ha perdido en gran parte. En 1996, Rosa María Martín publicó veinticinco poemas, generalmente sonetos escritos al final de su vida, como este Serenidad, al que pone música Elena Aranoa