Una puerta abierta a la música, la poesía, las versiones y a la sonrisa, con muchas pinceladas de cine y bandas sonoras. En recuerdo y homenaje al antiguo microprograma "Fonocopias" de Radio Nacional de España Radio 5
Miro alrededor
y encuentro tanta gente hundida en la contradicción,
sonrisas de Instagram con tanta pena en su interior,
fragmentos de poemas
míos en la SuperPop.
Y quién coño soy yo,
si todos tienen miedo a la palabra cantautor,
las radios venden música enlatada al por mayor,
me dice un productor “Marwan, te falta un reggaeton”.
Nunca cambiaré,
hace siglos ya lo dijo el escritor:
“quien se pone precio pierde su valor”.
No me rendiré,
tengo el corazón de un viejo boxeador
que cayó 1000 veces y se levantó
y entendió que eso era ser un campeón.
Vi la tentación,
el oro, los laureles, los aplausos, la ovación,
amigos que te quieren mientras dure tu canción,
creí ser especial, que yo era el hombre del millón.
Y aquí está la lección:
El éxito es tan solo anestesia ante el dolor,
el ego es solo un niño herido que nunca creció,
un niño que confunde el amor con la atención.
Nunca cambiaré,
hace siglos ya lo dijo el escritor:
“quien se pone precio pierde su valor”.
No me rendiré,
tengo el corazón de un viejo boxeador
que cayó 1000 veces y se levantó
y entendió que eso era ser un campeón.
Nunca cambiaré,
hace siglos ya lo dijo el escritor:
“quien se pone precio pierde su valor”.
No me rendiré,
tengo el corazón de un viejo boxeador
que cayó 1000 veces y se levantó
y entendió que eso era ser un campeón.
Hoy mezcla de poesía y música, ya que si Marwan se dio a conocer
por su faceta lírica, ha demostrado ser un buen músico y cantante, con al menos
seis años de recorrido musicla. Hace tres meses sacó nuevo CD con diez temas
muy cuidados desde el punto de vista musical y con unas letras que hacen
replantearse el presente
Acabo con su sexta canción, que es una de las que más me
gustan junto a la primera, Planeta Desconcierto, os dejo un video con la letra
Juana Ibarbourou (1892-1979), también conocida como Juana
de América, fué uno de los grandes escritores uruguayos, con una poesía modernista
llena de belleza y de temas cotidianos, glosando la belleza de la naturaleza.
Raíz salvaje fue su segundo libro, una maravilla donde lo cotidiano se
convierte en poema. Poco conocida en nuestro país (excepto claro en la pequeña
localidad lucense de Lourenza, donde la biblioteca
lleva su nombre, y de donde era oriundo su padre), merece la pena su recuerdo
La primera versión musicalizada de este poema la realiza
la gran cantante y compositora uruguaya Amalia de la Vega (1919-2000) en su
disco de 1975, “Amalia la nuestra”, os dejo con una grabación posterior por su
mejor calidad
En el 2019, al cumplirse el centenario del nacimiento de
Amaliade la Vega (María Celia Martínez
Fernández), desde el Gobierno Uruguayo, se lanza un disco homenaje que se llama
“Tributo 100 años Amalia de la Vega”, donde participan diversos músicos, este
poema lo reinterpreta la cantante uruguaya Maia Castro, con su versión finalizo
por hoy
Esta fue la poesía elegida por el cantante español Pedro
Guerra. Un poema romántico donde los haya y de una delicadeza y belleza
extremas, Se incluye en el disco “Neruda en el corazón”, donde se grabaron 18
poemas musicalizados por otros tantos músicos y que acompañado de dos DVD sobre
el poeta aparecieron en el año 2004 (es la tercera Pista)
Me han remitido un poema, que circula profusamente
titulado ¿Qué cuantos años tengo?” y rubricado por José Saramago, En principio
creo que esto es falso ya que no parece existir entre la obra literaria del autor
portugués, que cuando presento en 2005 su novela “Las intermitencias de la
muerte” afirmaba que a pesar de que la muerte sea el tema central de esa obra, no
se trata de una fuente de inspiración de sus novelas, sino que aparece con
naturalidad porque «la muerte la llevamos nosotros dentro» y cree que «tenemos
que morir para dejar seguir viviendo» a las otras generaciones, y afirmaba que la
conclusión de ese libro sería que : "nuestra única defensa contra la
muerte es el amor".
Un familiar me ha dicho que el poema es de un paisano de Lugones (Asturias) y que en sju origen no era tal poema sino una carta al periódico "La Nueva España" (Cartas de los lectores) el 26.2.2016. Este es el texto de la misma
¡Qué importa eso! Una cosa nos interesa adelantar a nuestros lectores:
no se nace joven, hay que adquirir la juventud mediante la constante evolución.
En buena parte de la sociedad existe un afán desmedido por conocer la edad
ajena. No sé por qué se les ocurre tal ocurrencia, valga la redundancia
incluida deliberadamente. A nuestro entender, la edad forma parte del
patrimonio de la humanidad y nadie, o casi nadie, se toma la licencia de
preguntarle por su patrimonio, salvo Hacienda. Cuando alguien osa en
preguntarnos tal dato, nuestra contestación es llevar el dedo índice a la
frente y decir de "aquí" tengo 30 años. Así despejo el interés de los
curiosos.
A este respecto, hemos recepcionado una serie de argumentos curiosos
para rebatir el interés por la edad ajena: ¿que cuántos años tengo? Ahí les va
la contestación resumida, para no extendernos demasiado:
-Tengo la edad que quiero y siento.
-La edad en que puedo gritar sin miedo lo que pienso.
-Pues tengo la experiencia de los años vividos y la fuerza de la
convicción de mis deseos.
-No quiero pensar en ello. Unos dicen que ya soy viejo/a, y otros, que
estoy en el apogeo.
-Pero no es la edad que tengo, ni lo que la gente dice, sino lo que mi
corazón siente y mi cerebro dicte.9
-Tengo los años necesarios para hacer lo que quiero, para reconocer
errores viejos, rectificar caminos y atesorar éxitos.
-Tengo la edad en que las cosas se miran con más calma, peo con el
interés de seguir creciendo.
-Tengo los años en que los sueños se empiezan a acariciar con los dedos,
y las ilusiones se convierten en esperanza.
-Tengo los años en que el amor a veces es una loca llamarada, ansiosa de
consumirse en el fuego de una pasión deseada y otra, en un remanso de una
pasión deseada… y otras en un remanso de paz, como el atardecer en la playa,.
-¿Que cuántos años tengo? No necesita marcarlos con un número, pues mis
anhelos alcanzados, mis triunfos obtenidos, las lágrimas que derramé por el
camino al ver mis ilusiones truncadas ¡valen mucho más que eso.
-¡Qué importa si cumplo 50, 60 o más, pues lo que importa es la edad que
siento! -Tengo los años que necesito para vivir libre y sin miedos. Para seguir
sin temor por el sendero, pues llevo conmigo la experiencia adquirida y la
fuerza de mis anhelos.
-¿Que cuántos años tengo? ¡Eso a quién le importa! Tengo los años
necesarios para perder el miedo y hacer lo que quiero y siento. ¿Qué importa
cuántos años tengo o cuántos espero alcanzar? Si con los años que tengo aprendí
a querer lo necesario y a tomar sólo lo bueno.
Que tengan todos nuestros lectores un hermoso día.
Mil gracias a Wilma Vidal y a su blog "Dicen que yo dije", (https://dicenqueyodije.blogspot.com/2020/02/que-cuantos-anos-tengo-de-jose-antonio.html) en su entrada del 2 de febero de 2020 y mil gracias a Gloria Antón por hacerme llegar esta información
Seguimos con discos del pasado año, en este caso de enero
del pasado año, pero más vale tarde que nunca, es el último trabajo de la cantante
sueca Viktoria Tolstoy grabado como los previos con el sello nórdico ACT, Once
temas variados escritos por gente dispar como Ida Sand o Bob Dylan, he elegido
el último tema porque es un canto a la vida y un estándard de jazz actual con
mas de quinientas versiones realizadas desde que lo grabó Shirley Horn en 1992.
Esta es la versión de Viktoria Tolstoy en un directo reciente
Para los que tengáis problemas con el inglés os dejo una
versión subtitulada con otra de mis voces favoritas Jacintha que lo grabó en el
2000 para su albúm “Autumn Leaves - The Songs of Johnny Mercer”, era el único
de los once temas en los que no consta Jhonny Mercer en los créditos, pero es
un tema tan bello que merecería serlo