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5 de abril de 2022
Gustavo Adolfo Bécquer. Rima LXXIII Cerraron su Ojos (¡Qué solos se quedan los muertos!). Amancio Prada, Vicente Monera y más versiones
4 de abril de 2022
Miguel Hernandez. Mis ojos sin tus ojos no son ojos. Carmen Linares y más versiones
1 de abril de 2022
Nuevos Discos Viejas Canciones. Pennies from Heaven Ramona Horvath y Nicolas Rageau y más versiones
El martes pasado, asistí a un concierto de este magnífico Dúo, Ramona Horvath y Nicolas Rageau, que el míercoles actuó en el Instituto Francés de Madrid. Dos excelentes músicos, ella pianista de origen rumano, y formación mundial que es un exponente de una nueva y magnífica generación de pianistas, que mezcla con soltura asombrosa, música clásica y jazz. Él, un contrabajista prodigioso, capaz de hacernos olvidar que estabamos ante un dúo en vez de ante un trío o un cuarteto, parisino de nacimiento con formación en Estados Unidos y otros países
Ambos nos deleitaron con un magnífico concierto de hora y media de duración y sino es porque había que abandonar la sala, aún estariamos extasiados viendoy oyéndolos tocar
Del repertorio que se inició creo recordar con una obra clásica de Duke Ellington, realizada para la Reina Isabel II de Inglaterra, conocida como La Sucrier Velours, siguió con muchos guiños de lo clásico al jazz (Debussy, Ravel,...) y viceversa. He elegido este tema de su último disco de 2019, titulado "Le Sucrier Velours", una canción popuñar de 1936, compuesta por Arthur Johnston para la película del mismo año interpretada por BingCrosby. Esta es la versión de Ramona y Nicolas.
Como os decía este tema se compuso en 1936 y la letra la escribió Johnny Burke, una sencilla letra que os dejo en inglés y español con la voz de Frank Sinatra que la graba con la Orquesta de Nelson Riddle, en 1956 en su disco "Songs for Swingin' Lovers" que creo es la que se ha usado y más tarde junto a la Orquesta de Count Basie en 1962 (una versión ligeramente más extensa), y luego grabada en varios conciertos y recopilaciones. La letra es sencilla, y ya que estamos en días de lluvia, no está de más escucharla con calma, a lo mejor incluso nos sirve si somos capaces de poner los paraguas al revés
Existen unas cuatrocientas versiones grabadas de esta canción, he elegido dos, como siempre por emociones, la primera, que es muy marchosa, es la segunda grabación de la canción de Louis Prima en 1957, junto a la vocalista Keely Smith, con el saxofonista Sam Butera y The Witnesses, en el disco "The Call of the Wildest" que se considera una mezcla innovadora de rock and roll temprano , jump blues y jazz , con un poco de humor excéntrico
La última versión es una de las más recientes, y la de uno de mis músicos favoritos James Taylor, que con setenta y dos años, en febrero de 2020, lanza su, hasta ahora último disco titulado "American Standards", es el décimo corte, de un gran disco, y en vídeo con letra por si lo quereis cantar
Buen finde aunque llueva
31 de marzo de 2022
30 de marzo de 2022
Miguel Hernández. Al verla muerta/ En mi Barraquica. Primeros Poemas 3 de 4
Al verla muerta
¡Probe Juanica! ¡Probe güertana…!
Por la sendica pal cimenterio la han llevao muerta
esta mañana…
¡Sa queao el cielo sin resplandores, sin luz la güerta…!
Fue la mocica, noble y bravía…
¡Fue la alegría
de éste partió!
El capullico más campanero que s’abré al día
y del almendro refloreció,
rama pulía.
Porlia sendica se lo llevaron su cuerpo yerto…
y dinde entonces el claro cielo de luto viste;
lloran los pájaros adentro el güerto…
¡Tuíco está triste!
El arroyico que se dilata,
disquía la choza que ella habitara, por tuíco el suelo
como una cinta e cascabelicos, como un espejo largo de plata,
cruza mudico, cruza enturbiao porque su cara ya no retrata,
y las palomas pal cimenterio guían el güelo…
¡Ya no más noches en su ventano lleno de luna, lleno de azahares
a los compases de mi guitarro
diré cantares!
¡Si s’ha marchao m’ascuchaba! ¡Pa icir pesares
el guitarrico ya sólo agarro!
La vida anoche muerta… ¡Qué hermosa!
En la mesica paecía dormía… Me entró una cosa…,
una de lloros cuando la vide con la mortaja,
rodía de cirios, blanquica y maja
como una rosa…
Por la sendica se la llevaron esta mañana… Y al verla muerta,
la palmerica mustió la palma;
se queó el cielo sin sus colores, sin luz la güerta,
tristes los pájaros, rota mi alma…
Miguel Hernández. En la huerta. 1930
Tampoco son conocidos los poemas de Miguel Hernández escritos en murciano. El anterior estaba cantado por El Niño de Elche en su disco del 2013, "Si a Miguel Hernández"
Otro poema similar, que también declama Emilio Gutiérrez Caba en el espectáculo que os comentaba ayer, es "En mi Barraquica". Poema que no ha sido musicado, pero creo que merece la pena escuchar
«Tiro piedras a un cordero,
y cada piedra que tiro
deja en la brisa un suspiro
y en el azul un lucero.»
MH
«¡En mi barraquica!»
¡Siñor amo, por la virgencica,
ascucha al que ruega!…
A este huertanico
de cana caeza,
a este probe viejo
que a sus pies se muestra
¡y enjamás s’humilló ante denguno
que de güesos juera!
¡Que namá se ha postrao elande Dios
de la forma esta!
M’oiga siño amo.
M’oiga osté y comprenda
que no es una hestoria que yo he fabricao
sino verdadera.
¿Por qué siñor amo
me echa de la tierra,
de la barraquica ande la luz vide
por la vez primera?
¿Porque no la cumplo? ¿Porque no le pagó?
¡Por la virgencica, tenga osté pacencia!
Han venío las güeltas malas, mu remalas.
¡Créalo! No han habío cuasi ná e cosechas:
Me s’heló la naranja del huerto;
no valió la almendra
y las crillas del verdeo, el río
cuando se esbordó, de ellas me dió cuenta
que las pudrió tuicas: no he recogío
pa pagar la juerza!
¡Créalo siñor amo! ¡Y si no osté vaya
a mi barraquica y verá pobreza!
Ella está en el derrumbe,
de agujeros llena,
por ande entra el sol, por ande entra el frío
y las lluvias entran
¡Créalo siño amo! Y también mi esposa
paece lo suyo y no por enferma,
que es de ver que sus pequeñujicos
de pan escasean,
y lo mesmo en verano que invierno
desnúas sus carnes las llevan.
¡Créalo siñor amo! y ¡Aspérese al tiempo
que cumplirle puea!
Yo le pagaré tuito lo que debo
¡Tenga osté pacencia!
¡Ay! no m’eche por Dios
de la quería tierra,
que yo quió morirme
ande yo naciera
¡En mi barraquica llena de agujeros,
de miseria llena!
Miguel era un hombre erudito pese a no haber podido tener una completa formación reglada, prueba de ello son sus versos adultos, como "El Rayo que no cesa", donde existen homenajes claros a los clásicos como Góngora
Buen miércoles